El informe se basa en una nueva metodología usada por ese organismo para calcular el PBI en Paridad de Poder Adquisitivo (PPA) con base en datos de 2011. En ese año, el Banco Mundial indicó que la económica del gigante asiático en PPA representaba un 87% de la economía de Estados Unidos.

De acuerdo con el FMI, China sobrepasaría a Estados Unidos en PBI en PPA cerca de 20171, aunque asegura que la economía china en PBI real en tasa de cambio es en realidad la mitad del PBI del gigante americano. Según el FMI, basándose en los últimos datos obtenidos a escala global, el PBI chino en tasas de cambio fue en 2012 de 8,2 billones de dólares, contra 16,2 billones de Estados Unidos2. Para el US Census3, la economía estadounidense sobrepasó en 2013 los 17 billones de dólares. En 2012, según el FMI, el PBI en PPA de China era de 12,3 billones de dólares, o sea, un 76% del tamaño de la economía estadounidense. Como podemos observar, los cálculos del FMI difieren de los cálculos de ICP del Banco Mundial ¿Por qué tremendas diferencias? Por lo complejo del método aplicado para ajustar la paridad en poder adquisitivo. Es en este punto en el cual muchos economistas advierten sus reservas en la metodología utilizada por los organismos internacionales para comparar fielmente los tamaños de las economías en PPA.

El mismo ICP en su informe asegura que “Debido a la complejidad de los procedimientos utilizados para recopilar los datos y calcular las PPA, no es posible estimar directamente sus márgenes de error.” En otras palabras, cualquier ajuste para PPA está lleno de dificultades ya que los tipos de cambio deben permitir que una moneda tenga el mismo poder de compra en cualquier parte del mundo.

MUCHAS PREGUNTAS Y ASTERISCOS

Durante mucho tiempo, la Oficina Nacional de Estadísticas de China (China’s National Bureau of Statistics) ha sido cuestionada por incompetencia o engaño en sus estadísticas, así como también por realizar doble conteo sobre las actividades económicas realizadas en ese país4. El actual Primer Ministro de China Li Keqiang5 se quejó en un cable diplomático de Estados Unidos publicado por WikiLeaks sobre las estadísticas artificiales del PBI elaboradas por esa Oficina6. En el último año, se ha puesto de manifiesto que los datos recogidos desde las diferentes provincias del país están sobreestimadas cerca de un 10%7. Esto ocurre dado que el sistema de recompensas dentro del Partido Comunista está orientado en el crecimiento, alentando a los gobiernos locales a informar un crecimiento de PBI mayor al real. El Primer Ministro llamó al Consejo de Estado a poner orden, pero, según los miembros de este consejo, las cosas “están fuera de control”.

Los estudios de los organismos internacionales se basan en los datos oficiales de los países miembros. Por eso llama la atención que la propia oficina de estadísticas china haya tomado distancia del informe realizado por el Banco Mundial. Esta Oficina, según el ICP, “expresó reservas” sobre la metodología del estudio y aseguró “no estar de acuerdo en publicar los resultados prioritarios sobre China”. Según el informe, la Oficina Nacional de Estadísticas de la República Popular China no respalda los resultados del informe como estadísticas oficiales.

Si las acusaciones tanto dentro como fuera de China son ciertas, significa que el Informe del Banco Mundial, como los de otros organismos internacionales que aseguraban que el país asiático se transformará en la economía más grande del mundo en un tiempo cercano, es totalmente erróneo.

OTROS DATOS PARA TENER EN CUENTA

Si se asume que efectivamente China se convertirá en la economía más grande del planeta tal como lo indica el Banco Mundial, ¿qué significado tiene?

Transformarse en la primera economía del mundo no significa que China sea rica. China tiene más de 1300 millones de habitantes y en términos per cápita en PPA, registró en 2011 un PBI per cápita en PPA anual de tan solo u$s 10.000, l que la ubica en el puesto 101 a nivel mundial, mientras que Estados Unidos se ubicó en el puesto 12 con un PBI en PPA de u$s 51.000. Ergo, si tomamos en cuenta esta medición, En EEUU son 5 veces más ricos que en China8.

De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), los estadounidenses disfrutan del salario más alto del mundo en PPA, con un ingreso neto medio de u$s 42,050 al año (lo que es lo mismo que u$s 54.450 brutos al año). Según esta organización, el ingreso medio por hogar en Estados Unidos es de unos u$s 84.000 anuales9. Según la Organización Mundial del Trabajo, un trabajador en ese país recibe un salario medio neto en PPA de unos u$s 3263 mensuales, lo que lo convierte en la cuarta fuerza laboral mejor paga del mundo (nuevamente difieren los resultados de los estudios de los diferentes organismos internacionales), solo detrás de Luxemburgo, Noruega y Austria10. Estados muy desarrollados.

En cambio, el ingreso medio por hogar en China, según la OCDE, estaría en u$s 10.220 en PPA anuales11. Y el salario medio de un trabajador chino de acuerdo con la Organización Mundial del Trabajo rondaría en PPA los u$s 656 mensuales12. Estos ingresos están muy por debajo del límite de pobreza de Estados Unidos, que se ubicó en 2013 en u$s 23.850 anuales13.

Según una medición de la Oficina de Estadísticas Laborales de los Estados Unidos (US Bureau of Labor Statistics), un obrero de una fábrica en Estados Unidos, tiene un ingreso de u$s 23,32 estadounidenses por hora. En cambio, un obrero fabril chino recibe un salario de solo u$s 1,36 estadounidenses la hora. El trabajador de una fábrica estadounidense realiza su tarea en un promedio de 8,6 horas diarias, mientras que el trabajador chino pasa un promedio de 12 horas diarias en la fábrica14. Conclusión, China puede llegar a ser enorme como su rival, pero no necesariamente rica.

Si la economía china en términos nominales en moneda fuerte, esto es, en dólares estadounidenses, es cercana al 50% de la economía de Estados Unidos, podríamos decir que por más que hoy China es la nación más comercial del mundo, no tiene el mismo peso internacional que los estadounidenses. Ejemplificándolo de una manera simple, si China necesita comprar materiales críticos en el extranjero (por ejemplo, su cada vez mayor dependencia del petróleo), lo que importa en estos tipos de transacciones es el valor internacional. En este campo, aunque haya sido la locomotora de la economía mundial en los años de la Gran Recesión, su peso real (aunque en aumento) es todavía, por lejos, mucho menor que el de Estados Unidos.

CRECIMIENTO A FUTURO

Los mercados internacionales se están preparando más para una Gran Recesión a la china, que para una China primera potencia. No son pocos los economistas que observan con preocupación el alto nivel de endeudamiento y la sobreexpansión del crédito barato de ese país. Si bien el país asiático es el poseedor de la mayor reserva internacional del mundo, su deuda pública y privada no para de crecer. De acuerdo con la Oficina Nacional de Estadísticas de China, no existen datos certeros sobre cuál es la deuda real total del país, ni de las provincias que lo conforman. Los bancos internacionales ven con preocupación cómo China ha ampliado tanto el crédito, que hoy, es tan grande en términos nominales como el crédito de la economía estadounidense. No son pocos los que consideran que la economía china se encuentra en el mismo estadio que la economía de Estados Unidos poco antes de la Gran Recesión.

El Consejo de Investigación de Desarrollo de China o DRC (China’s Development Research Council) proyecta que el crecimiento de ese país caerá por debajo del 6% anual para 202015. En cambio, para The US Conference Board, el crecimiento chino estará en un promedio del 3,7% a partir de 2019, cuando estalle la crisis del envejecimiento poblacional provocada por décadas de la política de un solo hijo16. El profesor Michael Pettis, especialista en economía china, de la Universidad de Beijing, asegura que China experimentará en las próximas décadas un crecimiento promedio de un 3% anual, al considerar que esta es la meta enteramente deseable del Gobierno chino, si se trata de domesticar las empresas estatales fuera de control y contrarrestar la creciente presión inflacionaria17.

Mientras tanto, en este lado del Pacífico, Estados Unidos están viviendo una verdadera Revolución Económica, impulsada principalmente por su revolución energética. Estados Unidos ya es la primera potencia energética del mundo y, en unos pocos años, según la IEA (International Energy Agency) y el Gobierno estadounidense, el país será autosuficiente en esa materia, convirtiéndose en exportador18. Esto está provocando el abaratamiento de costos e impulsando la reindustrialización del país. Los informes del la Oficina de Presupuesto del Congreso o CBO (Congressional Budget Office) de Estados Unidos indican que ese país entrará en una etapa de crecimiento de cerca del 4% anual, lo que hará decrecer su déficit financiero y, si se aplican las reformas necesarias, reducir su enorme deuda pública19. Actualmente ya hay Estados de la Unión Americana que crecieron en 2013 por encima de ese porcentual. Por ejemplo, Dakota del Norte experimentó un crecimiento del 13,4% y Texas (que tiene un PBI en PPA más grande que todos los países europeos, exceptuando Alemania, Francia y el Reino Unido), del 4,8%. Incluso California que en PBI en PPA se ubica en el puesto 8 mundial, y que hace un par de años estaba al borde del default y en una depresión económica, tuvo un incremento en su PBI de un 3,5% y superávit fiscal20.

La renacida economía estadounidense está siendo impulsada no solo por el sector High Tech o financiero, sino también por el sector energético, la manufactura, la industria química y el acero. El presidente Obama llamó a actuar al Congreso de ese país para no dejar sin financiación a los más de 112.000 proyectos de infraestructura a lo largo y ancho de esa nación, con una inyección a la economía de $ 302 mil millones de dólares en cuatro años. Hay un consenso general entre los economistas que los grandes problemas que enfrenta Estados Unidos están ligados con la polarización política de los últimos años, y que una vez solucionados estos, la economía estadounidense crecerá a paso sólidos.

CHINA ALCANZARÁ A LOS EEUU EN 2030

Todos los organismos internacionales e infinidades de estudios de reconocidas universidades proyectan que China sobrepasará a Estados Unidos en términos de PBI real en tasa de cambio en algún momento cerca del año 2030. Para el CEBR (Center for Economic and Business Research), ocurrirá específicamente en 202821. Pero al mismo tiempo las diferencias surgidas en términos de PBI en PPA se irán achicando, ya que los costos de producción chinos están en una escala alcista.

Una vez que esto suceda, la realidad parece demostrar que no entraremos en un Siglo Chino. Proyectando el crecimiento de ambas potencias, en las próximas décadas (y algunos se atreven hasta predecir casi hasta final de siglo), tendrán una economía similar en cuestión de tamaño. Ninguna le sacará demasiada ventaja a la otra. Pero con la particularidad de que ambas economías poseen lazos estrechos de interdependencias. De acuerdo con un estudio del CEBR, en 2028, el PBI real chino se ubicará en 33 billones de dólares, mientras que el de Estados Unidos será de 32,2 billones de dólares.

Si bien las diferencia de ambos países con el resto del mundo serán considerables, las diferencias entre Estados Unidos y China seguirán siendo tan grandes como en la actualidad, con un saldo a favor para los estadounidenses. Son precisamente estas diferencias las que argumentan algunos especialistas al asegurar que en realidad China no logrará realmente sobrepasar a Estados Unidos en el presente siglo XXI. ◊