SER ANFITRIÓN DE LA COMUNIDAD DE ESTADOS LATINOAMERICANOS Y CARIBEÑOS (CELAC)
Que este encuentro regional se haya llevado adelante en La Habana tuvo varias repercusiones. Por un lado el presidente cubano aprovechó la situación para restablecer las relaciones con México, y de esta manera recuperar a un aliado. El jefe del Estado mexicano, Enrique Peña Nieto, perdonó el 70% de la deuda cubana, como una demostración de buena voluntad hacia la isla.
Por otro lado fue de gran importancia que los secretarios generales de la ONU, Ban Ki-moon y de la OEA, José Miguel Insulza, participen del encuentro, considerando que desde 1962, año en el que Cuba fue suspendida de la OEA, ningún secretario general de este organismo visitaba la isla. Así se concretó el primer contacto oficial de la Organización de Estados Americanos con Cuba.
BRASIL CADA VEZ MÁS CERCA DE CUBA
Dilma Rousseff, presidente de Brasil, viajó a la isla para asistir a la cumbre de la Celac, pero el mayor interés estaba puesto en aumentar su presencia en el país caribeño. Se comenzaron a pactar nuevas relaciones bilaterales. La Jefa de Estado brasileño anunció que se otorgarán créditos de aproximadamente 500 millones de dólares para que Cuba importe bienes y servicios de Brasil, y para que importadores brasileños obtengan productos cubanos. La participación brasilera en la construcción del puerto Mariel fue de gran importancia. Ya se han destinado 1.100 millones de dólares, y es un hecho que se invertirán más sumas caudalosas para instalar industria y empresas brasileras en el complejo de Mariel.
La empresa brasilera que construyó el puerto, Odebrecht, anunció que está en el tramo final de los estudios para colocar una industria transformadora de plástico, también en Mariel. A Brasil estos proyectos le aseguran que sus empresas tengan un megapuerto desde donde exportar a toda América Central y el Caribe. A Cuba tener una zona de desarrollo le permitirá atraer inversiones y generar empleo.
FIN DEL BLOQUEO INSTITUCIONAL DE LA UNIÓN EUROPEA
Reunidos en Bruselas, los ministros de exteriores de los 28 países de la Unión Europea decretaron reanudar, en un futuro próximo, el diálogo político y la cooperación con Cuba, y así descongelar las relaciones, luego de años de distanciamiento. Sin embargo se mantendrá la denominada “posición común” del bloque, la cual fue adoptada en 1996 a instancias del gobierno español de José María Aznar con el objetivo de aislar al gobierno de Castro y condicionar las relaciones bilaterales a una serie de evoluciones en la situación de los derechos humanos en la isla. En el mes de enero del presente año el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, comunicó que el bloque estudia la posibilidad de rever el documento.
Esta decisión de la Unión Europea se debe al contexto regional y a las reformas que se están implementando en Cuba. La isla tiene una posición más sólida en América Latina, es reconocido por todos los países de la región, y hoy cuenta con poderosos aliados como Brasil. Bruselas ha interpretado que tanto la apertura económica y la concesión de mayores libertades individuales son signos de cambio, por lo que adoptó la postura de negociar un acuerdo de cooperación y de diálogo político con Cuba. El gobierno cubano informó que considera que la invitación del bloque europeo para abrir conversaciones sobre un acuerdo bilateral es constructiva.
El objetivo del acuerdo bilateral, que entraría en vigor en 2015, es extender las esferas de cooperación con la isla, acompañar las transformaciones socioeconómicas, el comercio bilateral, las inversiones y promover un mayor respeto de los derechos humanos.
El bloqueo institucional, el cual seguirá vigente a pesar de las renovadas relaciones entre Cuba y la Unión Europea, no impidió que el bloque europeo haya sido y siga siendo el primer inversor en la isla y el segundo socio comercial.
EL SUEÑO CUBANO: EL FIN DEL EMBARGO EEUU
El embargo económico estadounidense que asfixia a Cuba desde hace más de 50 años podría tener un fin no tan lejano. Debido a las cambios que se están dando en la isla y a las nuevas relaciones que se están estableciendo entre los países de América Latina y del bloque europeo con Cuba, el debate sobre si el embargo debe continuar o no se puso de manifiesto en la sociedad y en el sector político norteamericano para debatirse.
Una encuesta del Atlantic Council indicó que más del 50% de la población estadounidense está de acuerdo en normalizar las relaciones con Cuba. También existe un gran número de empresarios que está interesado en hacer negocios con Cuba, y una parte del sector político que también fantasea con la posibilidad de un cambio. A pesar de estos datos el gobierno ratificó la continuidad de su política, pero ya existe un flujo comercial de los Estados Unidos con la isla, las exportaciones del país del norte a Cuba son de 400 millones de dólares, lo que indica que ya existen grietas en el famoso bloqueo.
Lo que Cuba debe tener en cuenta para llevar adelante estos cambios es su propia cultura y la historia en la que vivió durante medio siglo. Su historia y su cultura es la que impondrá el ritmo de las transformaciones. Ser fiel a ellas es fundamental para reconstruirse en el escenario mundial que le espera. ◊